martes, 29 de mayo de 2007

Sudán, Darfur ¿ donde está la salida?

Este articulo ha sido extraído de : UMOYA


22/05/2007

* (Reedición del artículo publicado el pasado mes de marzo en Boletín IECAH de Acción Humanitaria)

Sudán, el país más grande de África, ocupa el puesto número 141 de 177 países en cuanto a su Índice de Desarrollo Humano, según el Informe de Desarrollo Humano del PNUD de 2006.Se trata de uno de los casos más claros de la vinculación de la pobreza y los conflictos armados. Ambos se autoalimentan, frenando el desarrollo y la seguridad (1).

Las desigualdades económicas han estado desde el principio en el origen del conflicto sudanés. La mayor atención en el norte (habitado por árabes musulmanes) por parte del régimen colonial británico en detrimento de los habitantes del sur (africanos cristianos y animistas) dieron lugar a la Primera Guerra Civil Sudanesa un año antes de que Sudán adquiriera su independencia en 1956, durando hasta 1972. Esta fuerte raíz económica del conflicto no ha sido la única, pero sí ha dado lugar a problemas étnicos y culturales y a una manipulación política en la lucha por la posesión de los recursos naturales (2).

En 1983 se sumó además la imposición de la ley islámica, sharia, por el entonces presidente Jaffer Nimeiri a toda la República de Sudán, incluidas las zonas del sur donde la mayoría no era musulmana, desatando la Segunda Guerra Civil Sudanesa. Ésta duró 20 años, dejando unos dos millones de muertos, alrededor de 600.000 refugiados y unos cuatro millones de desplazados internos, hasta la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno de Sudán y el principal grupo rebelde del país (Ejército Popular de Liberación de Sudán- EPLS-) el 26 de mayo de 2004.

Ahora empieza la repatriación de algunos refugiados sudaneses que huyeron durante el conflicto a países vecinos. En total el ACNUR repatrió en 2006 a 4.625 refugiados desde Etiopía (3), a 5.695 desde República Centro Africana desde agosto del 2006; y a unos 5.700 desde República Democrática del Congo. En total unos 30.000 refugiados sudaneses, a los que hay que sumar unos 70.000 retornados por sus propios medios.

Otras regiones de Sudán no están aún en situación de repatriar a sus habitantes (4). O bien los conflictos siguen causando continuos desplazamientos de la población, o bien se encuentran en un proceso de lenta recuperación tras los recientes pactos de paz, como es el caso del Sur y Este de Sudán (5).

Darfur, la crisis humanitaria más larga del mundo

Donde el conflicto se recrudece es en la región de Darfur. Ésta continúa siendo la crisis humanitaria más larga en el mundo, según palabras recientes del Secretario General de la ONU , Ban-ki-Moon. El conflicto, que comenzó en febrero del 2003 y ha causado más de 200.000 muertos y unos 2 millones de desplazados, no ha cesado tras el acuerdo firmado entre el Gobierno y uno de los grupos rebeldes, el Ejército de Liberación de Sudán (SLA), en el 2006 (6).

El origen de la crisis está de nuevo en el favoritismo económico que, según los rebeldes del SLA y del Movimiento para la Justicia y la Igualdad (MJE), las autoridades de Sudán mantienen para las comunidades del norte en detrimento de la región de Darfur, habitada por numerosas tribus de raza negra. Desde que los rebeldes se levantaron en febrero del 2003 el Gobierno viene respondiendo con la acción del ejército apoyado por milicias armadas de tribus árabes, los Janjaweed, que han llevado a cabo una política de tierra quemada en la que los atentados a los Derechos Humanos incluyen quema de aldeas, violaciones en masa y asesinatos indiscriminados.

En un paso hacia la justicia penal internacional, se ha conseguido llevar el caso de Darfur ante la Corte Penal Internacional (CPI) (7) tras el voto del Consejo de Seguridad de la ONU (en marzo del 2005) para investigar los casos de crímenes de guerra perpetrados. Las investigaciones empezaron en junio del mismo año por orden del Procurador Luis Moreno-Ocampo, y, por fin, el 27 de febrero de 2007, se han presentado por primera vez los elementos de prueba que indican la comisión de crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en Darfur por el antiguo viceministro de Interior, Ahmad Muhammad Harun, y el dirigente de las milicias Janjaweed, Ali Kushayb. Las pruebas han sido recogidas durante los últimos 20 meses y se refieren a los ataques dirigidos contra la población civil de Kodoom, Bindisi, Mukjar y Arawala (Darfur Oeste) entre agosto del 2003 y marzo del 2004, tras las órdenes de los acusados a las milicias Janjaweed de realizar persecuciones, violaciones en masa y otros abusos sexuales, matanzas, torturas, tratos degradantes, pillaje y desplazamientos contra las comunidades, entre otros crímenes. A pesar del rechazo de Sudán de la legitimidad de la CPI para conocer del caso, la Cámara Preliminar I de la Corte examinará los elementos de prueba de 51 cargos de crímenes de guerra y lesa humanidad para decidir sobre la comparecencia de los acusados ante la jurisdicción internacional; mientras se sigue la investigación sobre otros quince nombres más, entre ellos Musa Hilal, líder tribal que coordinó los ataques de las milicias árabes.

Cuatro años después la situación ha empeorado

Hoy, cuatro años después del inicio del conflicto, la situación humanitaria, lejos de mejorar, se recrudece.

A mediados del año pasado se habían registrado unos 21.000 casos de cólera (con 660 muertes), 5900 casos de meningitis (con 470 muertes), fiebre amarilla y Hepatitis E.

La violencia incesante y los ataques del Gobierno y las milicias contra la población civil han provocado en el último año el desplazamiento de casi medio millón de personas, y de 25.000 en lo que va de año 2007, según fuentes de la UNMIS (8). Estos datos demuestran no sólo que el conflicto sigue vivo, sigo que la situación sigue empeorando cada vez más. El Consejo de la Unión Europea recalca además que el conflicto de Darfur está añadiendo inestabilidad en las zonas vecinas, en particular en Chad y en República Centroafricana.

La situación humanitaria, grave de por sí, se ve empeorada por el incremento de los ataques a los trabajadores humanitarios en la zona, unos 13.000, limitando por ende el acceso a la Ayuda Humanitaria. Nunca ha sido tan difícil hacer llegar la ayuda a la población de esta región del oeste de Sudán, de la que dependen unos cuatro millones de personas, de los cuales más de 2 millones son desplazados internos.

En los últimos seis meses han sido asesinados 12 trabajadores humanitarios, y las ONG y miembros de la ONU han sufrido unos 30 ataques, entre los que destacan continuos pillajes y robos de coches (más de un centenar en 2006), evacuaciones por ataques de milicias (9), y el arresto y agresiones contra personal humanitario (10).

El mensaje del Enviado Especial para Darfur del Secretario General de la ONU y su contraparte de la Unión Africana en sus recientes reuniones con las partes del conflicto ha incluido la necesidad de acabar con estas hostilidades a las operaciones humanitarias, que violan el derecho a recibir ayuda humanitaria. También el Comisario Europeo encargado del Desarrollo y la Ayuda Humanitaria , Louis Michel, ha mostrado su preocupación exigiendo al gobierno de Sudán el respeto del Derecho Internacional Humanitario y la agilización de los procedimientos administrativos para las agencias humanitarias.

La mayoría de las ONG han congelado sus operaciones en las zonas rurales de Darfur desde diciembre de 2006, y muchas de ellas están considerando dejar sus actividades en la zona. La consecuencia temida de la retirada de las ONG es que, a causa de la ayuda, se dé una nueva ola de desplazamientos de población hacia los centros urbanos de Darfur u otras zonas donde puedan acceder a ella.

La OCHA (11) por su parte ha informado de que continuará trabajando en la región, adaptando, si fuera necesario, las operaciones para asegurar que los más vulnerables reciban al menos una ayuda mínima.

La postura del Gobierno de Sudán no ayuda a mejorar la situación

Ante esta situación el Gobierno sudanés de Omar el-Bashir no sólo no está dando respuesta política, sino que su papel en el conflicto y en la labor de la comunidad internacional está siendo de un continuo freno.

Por una parte ha venido rechazando la incorporación de cascos azules a la AMIS (12) votada por el Consejo de Seguridad de la ONU en agosto de 2006 (Resolución 1.706) que defendía una “operación híbrida” entre los cuerpos de la Unión Africana y los de la ONU , bajo el control de ésta.

Por otra parte las conversaciones con los grupos rebeldes que no firmaron el Pacto de Abuja (DPA) están congeladas, lo que ha forzado el desplazamiento del Enviado Especial para Darfur del Secretario General, Jan Eliason, y su contraparte de la Unión Africana , Salim Ahmed Salim, a la capital, Khartoum, el 12 de febrero para reunirse tanto con los signatarios como con los no signatarios del DPA a fin de reavivar el proceso de paz de la región.

Además, la delegación especial del Consejo de Derechos Humanos de la ONU (CDH) que se acordó en 2006 para investigar la violación de Derechos Humanos en Darfur (13), ha visto abortada su misión por la negación del Gobierno sudanés a librarles los visados necesarios para visitar la zona. La delegación sólo ha podido entrevistar a refugiados darfureños en la zona limítrofe en Chad (14).

Por último, los crecientes ataques que vienen sufriendo los trabajadores humanitarios en los últimos meses en la zona, pudieran ser, según opiniones de varios responsables de ONG, una estrategia del régimen sudanés y las milicias Janjaweed para ocupar la zona por la fuerza.

España destinó 108 millones de euros a Sudán en 2005

El Plan de la ONU de 2007 para Sudán prevé la necesidad de 1.25 billones de dólares para actividades humanitarias y 560 millones de dólares para rehabilitación y desarrollo, en total para unos 5.5 millones de personas.

Por su parte, la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) considera a Sudán como País de Atención Especial en su Plan 2005-2008, y ha aportado el 31,2% de los 108,07 millones de euros que España dedicó a la Ayuda Humanitaria del país en 2005. (15)

Muchos esfuerzos económicos y políticos son necesarios aún en la región.

Los cuatro años de conflicto se ceban en los más vulnerables: mujeres y niños.

Se estima que de los 4 millones de personas afectadas por el conflicto, unos 1,8 millones son niños, y de los 2 millones de desplazados la mitad, 1 millón, son niños (16).

La tasa de muertes de recién nacidos en Sudán es de 63 por cada 1.000 nacidos vivos (17).

Las violaciones contra los niños no han disminuido, en particular la muerte y mutilación de niños, su reclutamiento y utilización como soldados, los actos graves de violencia sexual, los secuestros y la denegación a los niños del acceso a la ayuda humanitaria, tal como señala el último Informe del Secretario General sobre los niños y los conflictos armados en el Sudán de 17 de agosto de 2006 (18).

Para favorecer la reducida participación de las mujeres en la sociedad, muchas de ellas viudas a causa del conflicto armado, se presentó el documento “Prioridades de la mujer en el proceso de paz y reconstrucción de Darfur” en la séptima ronda de negociaciones del Acuerdo de Paz de Darfur. En él se recogen prioridades clave para las mujeres y los niños y niñas tales como su protección especial en situaciones de conflicto; la educación en los campamentos de refugiados y de desplazados internos como un medio para garantizar su seguridad; y la creación de una institución de apoyo a las mujeres, niños y niñas en el que se incluya soporte jurídico y psicológico. (19)

En una situación de emergencia compleja y conflicto continuado, se están empezando a coordinar los mecanismos para facilitar la transición de la asistencia humanitaria hacia la reconstrucción y desarrollo en la mayoría de las regiones, iniciando una suave retirada de la OCHA. Las recomendaciones del Joint Assessment Mission (JMA) (20) conllevan un período de seis años de sostenibilidad de la Paz , Desarrollo y erradicación de la pobreza en Sudán, aunque en Darfur aún no se dan las condiciones necesarias para llevar a cabo esta rehabilitación y desarrollo.

Darfur ha sido objeto en los últimos meses de importantes visitas de organismos internacionales y diplomáticos: Jan Eliason, Salim Ahmed Salim, Ban-ki-Moon, el alto comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados -Antonio Guterres-, la Representante Especial de la ONU para la cuestión de los niños y los conflictos armados -Radhika Coomaraswamy-, la Secretaria de Estado de Cooperación Internacional española -Leire Pajín- y el secretario de Estado de Asuntos Exteriores español -Bernardino León-, etc, etc.

Viajes de ida y vuelta, de entrada y de salida, que deberán dar sus frutos para que las poblaciones afectadas también encuentren su salida a la alargada situación de subdesarrollo y conflicto.

Notas aclaratorias y bibliográficas:

(1) Entendidos en su sentido más amplio de Desarrollo Humano y Seguridad Humana, conforme al Informe del ex Secretario General de la ONU , Kofi Annan, Un concepto más amplio de libertad: desarrollo, seguridad y derechos humanos para todos , de 21 de marzo de 2005.

(2) En el norte se concentra la actividad comercial y agrícola, las redes de transporte terrestre y marítimo, mientras que el sur alberga las fértiles tierras de Renk, la zona petrolífera de Bentiu y los yacimientos de níquel y uranio.

(3) El 27 de febrero de 2006, el Gobierno de Sudán firmó un acuerdo tripartito con el Gobierno de Etiopía y el ACNUR para la repatriación de los refugiados sudaneses en Etiopía .

(4) Aún quedan unos 328.000 refugiados en Uganda, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Kenya, Etiopía, Eritrea y Egipto, según fuentes del ACNUR de febrero 2007.

(5) Firmados en junio y octubre de 2006 respectivamente.

(6) Pacto de Paz de Darfur (DPA, de sus siglas en inglés Darfur Peace Agreement) , firmado en Abuja, Nigeria, el 5 de mayo de 2006 entre el Gobierno Sudanés y el principal grupo rebelde de Darfur. Otros dos de los grupos disidentes se negaron a firmar el Tratado.

(7) La CPI fue creada por el Estatuto de Roma en 1998, y entró en vigor en el 2002. Tiene potestad para juzgar los crímenes de genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad cometidos después del 1 de julio 2002 en los países donde se ha ratificado, o por decisión del Consejo de Seguridad.

(8) Misión de la ONU para Sudán, establecida por Res. Nº 1590 del Consejo de Seguridad, de 24 de Marzo de 2005. Para más información sobre la UNMIS ver: http://www.unmis.org/

(9) Evacuación de trabajadores de ONG y ONU en El Fasher (capital de Darfur Norte), Kutum (Darfur Norte), Gereida (Darfur Sur), en diciembre de 2006.

(10) El 19 de enero la policía sudanesa arrestó en Nyala a 20 miembros de ONG y de la ONU.

(11) Oficina de las Naciones Unidas para los Asuntos Humanitarios.

(12) Misión de la Unión Africana para Sudán creada en abril de 2004. Para más información sobre la AMIS ver: http://www.accord.org.za/ct/2005-4/ct4_2005_pgs52_53.pdf .

(13) Resolución de 13 de diciembre de 2006 del CDH de la ONU. El CDH fue creado por Resolución de la Asamblea General de la ONU de 3 de abril de 2006 (A/RES/60/251).

(14) La composición de delegación se eligió el 26 de enero de 2007 con la Nobel de la Paz Jody Williams como Presidenta, el relator especial para los Derechos Humanos en Sudán, Sima Samar, el ex alto comisario de esa misma área, Bertrand Ramcharan ( que ha calificado la crisis de Darfur de genocidio) , y un miembro de la Comisión contra el Racismo del Consejo de Europa, Mark Nutt. L os resultados de la investigación con las recomendaciones se presentarán a los miembros del CDH durante su próxima sesión en Ginebra del 12 de marzo al 5 de abril.

(15) Datos elaborados por el IECAH . Borrador de la Estrategia de Acción Humanitaria de la Cooperación Española de la DGPOLDE de la Secretaría de Estado para la Cooperación Internacional . Enero 2007.

(16) Informe Acción Humanitaria de UNICEF 2007.

(17) Estado Mundial de las Madres 2006, Salvar la vida de las madres y de los recién nacidos . Save the Children. Octubre 2006.La cifra asciende a 90 muertes de cada 1.000 niños en los cinco primeros años de vida, según el Informe de UNICEF Estado Mundial de la Infancia 2007, La mujer y la infancia. El doble dividendo de la igualdad de género.

(18) En base a la Resolución 1612 del Consejo de Seguridad de 26 de julio de 2005.

(19) El documento se realizó por un equipo de 20 mujeres expertas en asuntos relacionados con el género, reunidas previamente en Darfur con mujeres de diferentes tribus y etnias, con el respaldo de los gobiernos de Canadá, Noruega y Suecia, y por UNIFEM.

(20) Para más información sobre el JMA ver: http://www.unsudanig.org/

2 comentarios:

Josep Maria Yago Suau dijo...

Como siempre a correr para ver como arreglamos lo que hemos estropeado. No habria que olvidar quien y/o que posibilitó que esté pasando lo que pasa. Por otro lado creo que és útil el papel de las ONG però tendria mis dudas si alguién sugiriese que no entrasen ONG y, a la vez, no entrasen armas, por ejemplo, que alguien, con nombres y apellidos, vende.

Luz dijo...

Josep, gracias por tu participación, me gustaría muchísimo que ampliaras tu comentario, se trata de informarnos lo mejor posible y de pasar esa información a los lectores. Tus aportes son bien recibidos.

Abrazos